Semana 2: “Escritura”
David Marcano, Venezuela
Día 3: “Vida en tiempos bíblicos”
Los testigos que Cristo presenta en su defensa en la narración de nuestro pasaje son Juan el Bautista (Jn. 5:33-35), las obras del Padre (36), El Padre (37) y las Escrituras (38,39). Todos estos testigos eran suficientes para hacer comprender a las personas que Jesús era el Cristo.
Es importante que comprendamos también lo vital que era un testigo en aquel entonces, la ley decía que por el testimonio de 2 o 3 personas se podría comprobar cualquier argumento, es por ello que Jesús llama a la palestra a más de un testigo para que sus interlocutores comprendamos que Él es el Mesía prometido.
El principal problema para los líderes religiosos de aquel tiempo era que carecían de amor (5:42), no buscaban la gloria de Dios, sino la de los hombres (44); no comprendieron correctamente los escritos de Moisés (46), no creían en Cristo (47). Debido a todo esto Jesús les indica que falsos profetas los engañarían con facilidad y que serían juzgados por lo que el mismo Moisés escribió (v. 46).
En tu caminar cristiano debes tener en cuenta todos los testigos a favor de Cristo, te ayudarán a tener una fe más firme, te recordarán también lo importante que debe ser para ti la vida eterna que Jesús te prometió. Mientras más tiempos inviertas en la lectura bíblica, crecerás más y conocerás más a Cristo, de esta manera también evitaras cometer los errores que cometieron muchas personas descritas en este libro.
Preguntas para reflexionar:
¿Mencione cuáles son los testigos de Cristo?
¿Qué atrajo tu atención en este día y por qué?
¿Cómo encontramos la vida eterna?